
En lo que será su cuarta intervención en el marco de la Asamblea General de la ONU, la problemática que afecta a Haití ha sido el tema principal que ha llevado el presidente de la República en sus discursos.
A las 11:00 de la mañana de este lunes, el presidente Luis Abinader tiene pautado tomar su turno de hablar ante la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y su discurso se centrará en la crisis sociopolítica que se vive en Venezuela tras las elecciones de julio, la lucha de contra el narcotráfico durante su gestión y pondrá otra vez sobre la mesa el tema de la situación de Haití.
En lo que será su cuarta intervención en el marco de la Asamblea General de la ONU, la problemática que afecta a Haití ha sido el tema principal que ha llevado el presidente de la República en sus discursos.
2023
Durante su participación en 2023, Abinader resaltó que era de “altísima prioridad” que el organismo internacional tomara una posición más agresiva reiterando que el vecino país no solo sufre una tragedia medioambiental, sino también una inestabilidad política y social que puede convertirse en una amenaza para toda la región.
En esa ocasión el mandatario agitó aún más el envío de una “fuerzas de la paz”, compuesta por miembros de la Policía de Kenia, en vista de que las bandas criminales continuaban ganando terreno en ese país.
“Lo que ocurre en Haití es una ruptura del orden público por parte de elementos criminales sin ninguna reivindicación política o ideológica, por lo que acoger la solicitud de ayuda de las autoridades haitianas enviando una fuerza multinacional, es cónsono con el espíritu y la letra de la Carta de Naciones Unidas y del mandato de esta Organización acorde con el derecho internacional para garantizar la paz”, señaló el mandatario en esa oportunidad.
Esa participación del mandatario se daba apenas días después de haber tomado la decisión de cerrar la frontera por tierra, aire y mar con Haití debido al conflicto fruto de la construcción ilegal del canal sobre el transfronterizo río Masacre o río Dajabón, Abinader.
2022
Un año antes, el mandatario no participó de la Asamblea ya que prefería quedarse en el país para evaluar el impacto que del huracán Fiona por la costa este y en su lugar asistió el canciller Roberto Álvarez, quien calificó la crisis sociopolítica de Haití como una “situación desesperante”.
Álvarez describió que los conflictos armados que habían ocurrido hasta ese entonces habían ocasionado una “tragedia mayor” en Haití, que la que causó el terremoto de enero del 2010 y que a pesar de eso, la comunidad internacional no le daba la atención que merecía.
“Ante la inhabilidad de las autoridades de establecer el orden y garantizar la seguridad ciudadana, la resiliente población haitiana se siente abandonada a su propia suerte, por el miedo que paraliza a una gran parte de la población. La violencia ha creado una profunda fragmentación social, que no permite la más elemental cohesión. Por su parte, los haitianos esperan con desesperanza la tardada ayuda de la comunidad internacional. Como dijo el presidente Abinader el pasado año frente a este auditorio ‘Haití no puede esperar más’”, manifestó el ministro de Relaciones Exteriores.